Como recordaréis de anteriores publicaciones, Han y Luke fueron abandonados recién nacidos en una bolsa dentro de un contenedor de basura.
Tuvieron la suerte de ser encontrados por buenas personas que los atendieron de la mejor manera que supieron, no obstante, al no haber tomado los calostros de su madre su sistema inmunitario no era lo suficientemente fuerte, y a los pocos días de llegar a nosotros cayeron enfermos de Parvovirosis.
Ha costado una semana de hospitalización, pero los cuidados de su veterinario, Marco, han hecho que Han y Luke hayan podido superar esta peligrosa enfermedad, y ahora están ya completamente recuperados.
Esto ha supuesto una fuerte inversión económica, además de un enorme trabajo, pero ha valido la pena, Han y Luke se lo merecen.
Lástima la inhumanidad de quien los abandonó, no merece ser llamado persona.